Lugar: autobús urbano
Hora: las cinco y media de la tarde, coincidiendo con la salida de los colegios
Protagonista: un niño de unos 10 años, pelo corto en pincho y camisa blanca por dentro del pantalón de tergal azul marino, o lo que es lo mismo uniforme del colegio privado más “carotrogado” de la ciudad.
El niño sentado en el autobús urbano saca de su pantalón un móvil de última generación U.G. y realiza una llamada.
- ¡Hola papi!
Supongo que el padre contesta al teléfono y comienza su mono-logo (siendo lo primero literal)
- ¿qué ha pasado papi? ¿has vuelto a chocarte con el Mercedes?... ¿tú estás bien no?... menos mal que tienes todavía el BMW y la mami puede ir con el AUDI a llevarme a las clases de piano…
La conversación entiéndase con una entonación de niño que se cree superior y con el estupor provocado en la gente de alrededor.
- …¿vendrás pronto esta noche? Quiero que me enseñes a ponerme los esquíes nuevos para este finde…
No pude soportarlo más y en la parada más próxima, espere a que se abriera la puerta y me lancé de cabeza como si una piscina esperara ahí fuera. No fue así y tras unas cuantas vueltas de campana y unas rodadas por el suelo… debí perder el conocimiento unos minutos… abrí los ojos y vi que una niña pobre con las manos en posición de pedir me miraba con sus ojos tristes y carentes de todo tipo de pertenencias, suplicándome que le diera una monedita.
Le puse en su mano dos o tres que tenía en el bolsillo y mientras se alejaba solo quise gritar y gritar: ¡maldita vida esta! ¡Unos tanto y otros tampoco!…
Hora: las cinco y media de la tarde, coincidiendo con la salida de los colegios
Protagonista: un niño de unos 10 años, pelo corto en pincho y camisa blanca por dentro del pantalón de tergal azul marino, o lo que es lo mismo uniforme del colegio privado más “carotrogado” de la ciudad.
El niño sentado en el autobús urbano saca de su pantalón un móvil de última generación U.G. y realiza una llamada.
- ¡Hola papi!
Supongo que el padre contesta al teléfono y comienza su mono-logo (siendo lo primero literal)
- ¿qué ha pasado papi? ¿has vuelto a chocarte con el Mercedes?... ¿tú estás bien no?... menos mal que tienes todavía el BMW y la mami puede ir con el AUDI a llevarme a las clases de piano…
La conversación entiéndase con una entonación de niño que se cree superior y con el estupor provocado en la gente de alrededor.
- …¿vendrás pronto esta noche? Quiero que me enseñes a ponerme los esquíes nuevos para este finde…
No pude soportarlo más y en la parada más próxima, espere a que se abriera la puerta y me lancé de cabeza como si una piscina esperara ahí fuera. No fue así y tras unas cuantas vueltas de campana y unas rodadas por el suelo… debí perder el conocimiento unos minutos… abrí los ojos y vi que una niña pobre con las manos en posición de pedir me miraba con sus ojos tristes y carentes de todo tipo de pertenencias, suplicándome que le diera una monedita.
Le puse en su mano dos o tres que tenía en el bolsillo y mientras se alejaba solo quise gritar y gritar: ¡maldita vida esta! ¡Unos tanto y otros tampoco!…
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